La aurículopuntura es una variante de la acupuntura mediante la cual se tratan distintas dolencias, estimulando puntos ubicados en la oreja.
Todo nuestro organismo en la oreja
En la oreja existen más de 120 puntos reflejos que están asociados a diferentes zonas del cuerpo. Cuando una región del cuerpo humano pierde el equilibrio fisiológico, pueden detectarse en la oreja los puntos alterados. Por otro lado, una vez detectados los puntos, se puede proceder a su estímulo para volver a equilibrar el organismo. La aurículopuntura tiene como objetivo estimular el punto reflejo de esta zona afectada, logrando equilibrar la energía y mejorar el síntoma.
La ventaja de la auriculopuntura es que es relativamente sencilla y ofrece grandes posibilidades de variación. Es posible utilizar agujas, semillas, presión o masaje. Esto significa que aquellos a los que no les gustan las agujas también pueden aprovechar sus beneficios.
¿Y cuáles son sus indicaciones?
Esta técnica tiene multitud de beneficios para casi todas las dolencias. Es muy simple y muy eficaz que ha resultado particularmente eficaz en casos de cefaleas, migrañas aftas, herpes labial trastornos mamarios problemas digestivos o renales gases, estreñimiento, gastritis, indigestión, cólicos, úlcera gastroduodenal, diarreas, vómitos, hemorroides problemas menstruales, esguinces, dolor de huesos y articulaciones, artritis, reuma, insomnio, angustia, ansiedad, depresión, estrés asma, sinusitis trastornos de la alimentación como la bulimia y anorexia, obesidad, adicciones como el alcoholismo y el tabaquismo, entre las más comunes.
Las enfermedades suelen responder casi de una forma inmediata a la aurículopuntura controlándose los síntomas en un corto periodo y no tiene efectos secundarios.
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